Cada vez más organizaciones elaboran internamente el Plan Estratégico (con ayuda de consultores externos cuando es necesario). Pero cuando hablamos de Estrategia, muchas organizaciones creen en el poder de la "magia".
Construyen un plan estratégico, identifican los indicadores clave de rendimiento (KPI) y las metas y soporte necesarios para cumplir sus objetivos y luego esperan que, como por arte de magia, se logre el éxito. Esto es algo que vemos una y otra vez, en todo tipo de organizaciones y tamaños.
El hecho es que desarrollar el plan y los indicadores clave de rendimiento es solo el primer paso, la clave es implementar el plan, que se trata principalmente de los proyectos e iniciativas que se seleccionan para ayudar a lograr los objetivos estratégicos.